"Dentro de veinte años estarás más decepcionado por las cosas que no hiciste que por las que hiciste. Así que suelta las amarras. Navega lejos del puerto seguro. Atrapa los vientos alisios en tus velas. Explora. Sueña. Descubre". - Mark Twain
Así que te gustaría emprender tu primera aventura por el mundo. Qué emoción. Puede que también sientas un poco de ansiedad y temor, es normal. Planear un viaje puede ser difícil, pero queremos ayudarte.
Esta lectura rápida le ayudará a ahorrar tiempo, dinero y estrés a la hora de planificar su primera aventura.
Tanto si planea su primer viaje en solitario como si lo hace en grupo, esta guía le ayudará a cubrir todas las bases para que se arrepienta menos y se divierta más.
Empieza por decidir adónde quieres ir.
1. Elegir el destino
El mundo es un lugar diverso y hermoso, con ciudades, pueblos costeros, festivales, parques nacionales y mucho más para deleitar a todo tipo de aventureros. Con tantas opciones, limitarse a un solo lugar puede ser complicado. Quizá ya sepa adónde quiere ir. Pero si no es así, le recomendamos que defina el objetivo de su viaje y elija un destino que pueda cumplirlo. Así se asegurará de volver a casa con el corazón y el carrete llenos.
Tanto si sueña con una relajante escapada junto a la piscina para reponer fuerzas, como si se va de festival en festival por Europa para conocer a nuevos amigos o se embarca en una aventura culinaria para inspirar su cocina en casa, hay una aventura única para cada uno y (aunque suene cursi) el único límite es su imaginación.
Para que la decisión sea más fácil, he aquí algunos factores clave a tener en cuenta:
Tiempo y distancia: Piense de cuánto tiempo dispone para su viaje y hasta dónde está dispuesto a viajar. Por ejemplo, un londinense que disponga de un par de días de vacaciones puede querer viajar en un radio de 2-3 horas para no perder demasiado tiempo en desplazamientos. Podría explorar lugares como Florencia, París o Galway. En cambio, a un londinense que tenga más días de vacaciones no le importarán tanto los vuelos de larga distancia. Esta persona podría optar por relajarse junto a la piscina durante una escapada de más de 10 días a Cabo o Bali.
Temporadas de viaje: El tiempo lo es todo. Algunos destinos tienen temporadas turísticas altas en las que los precios se disparan y las multitudes pueden desbordar incluso los lugares más impresionantes. Viajar fuera de temporada puede ahorrarle dinero, darle más espacio para disfrutar de las atracciones y ofrecerle una experiencia más auténtica. Por ejemplo, Italia es un país bullicioso en verano, pero si se visita en primavera u otoño el clima es más suave y hay menos turistas.
Transporte local: Si tiene un presupuesto limitado, la forma de desplazarse es tan importante como la manera de llegar. Considere si el destino dispone de transporte público fiable o si necesitará alquilar un coche (o una bicicleta) para explorar. Por ejemplo, ciudades europeas como París y Berlín son conocidas por su excelente transporte público, mientras que las zonas rurales o más remotas pueden requerir su propio juego de ruedas. Dedique algún tiempo a familiarizarse con el sistema de transporte público. Podría ahorrarte una fortuna en taxis, Uber y alquiler de coches.
Experiencias locales: Compruebe si en su destino potencial se celebra algún festival local, mercado o acontecimiento cultural durante las fechas de su viaje. Estos acontecimientos ofrecen una ventana única a la vida local, añadiendo una dimensión extra a su viaje. Imagínese bailando por las calles de Barcelona o disfrutando del vino fresco en una fiesta de la vendimia en la Toscana: experiencias únicas que harán que su viaje sea inolvidable.
Consideraciones prácticas: Antes de fijar tu destino, piensa en aspectos logísticos como los requisitos de visado, las barreras lingüísticas, la conectividad telefónica y la seguridad. Algunos lugares exigen la solicitud de un visado por adelantado, mientras que otros pueden necesitar que repases frases clave en el idioma local. Investigar un poco te ayudará a tener un viaje tranquilo, sin sorpresas de última hora.
2. Establecer un presupuesto realista
Uno de los aspectos más importantes a la hora de planificar un viaje es elaborar un presupuesto que le permita disfrutar plenamente de su aventura sin arruinarse. Esto no implica escatimar en experiencias, sino tomar decisiones informadas para estirar el dinero al máximo.
Empieza por calcular tus gastos principales: billete de avión, alojamiento, comidas y actividades.
Los vuelos son a veces la parte más cara de un viaje, así que consulta aplicaciones de viajes y sitios de comparación como Skyscanner o Google Flights para encontrar descuentos. Si tus fechas son flexibles, busca vuelos entre semana, que suelen ser más baratos que los fines de semana. Configura alertas de precios para que te avisen cuando bajen los precios, y considera la posibilidad de viajar desde aeropuertos cercanos si así ahorras dinero.
El alojamiento es el próximo gran gasto. Los hoteles pueden ser una gran opción si buscas una experiencia con todos los servicios, o los albergues son estupendos para una opción asequible. Booking.com es ideal para comparar opciones, pero a menudo se pueden encontrar ofertas reservando directamente con los hoteles. Google Maps es también una potente herramienta para localizar alojamiento en los barrios preferidos.
Airbnb también es muy popular. Este sitio web o aplicación pone en contacto a los viajeros con opciones de alojamiento únicas, como casas enteras, habitaciones privadas y estancias especiales, que ofrecen una experiencia local más personalizada.
Y no pases por alto opciones menos tradicionales, como el servicio de canguro, con el que puedes conseguir alojamiento gratis a cambio del cuidado de tu mascota o de tu hogar, o el couchsurfing para vivir una experiencia local más envolvente.
En cuanto a la comida, no podrás prepararla en la mayoría de los hoteles, pero en todos los demás tipos de alojamiento puedes probar una combinación de comer fuera y preparar tus propias comidas. La comida callejera y los restaurantes locales suelen ser mucho más baratos que los restaurantes dirigidos a los turistas (a los que llamamos "trampas para turistas"), y es probable que te lleves una impresión más auténtica de la cultura local. Si te alojas en un lugar con acceso a cocina (albergue, Airbnb), acércate a un mercado local para comprar ingredientes frescos. No sólo ahorrarás dinero, sino que añadirás una experiencia cultural única a tu viaje.
Por último, ten en cuenta el coste de las actividades. Hay muchas actividades gratuitas o de bajo coste, como festivales locales, rutas de senderismo o parques nacionales. Busca en Google y en las redes sociales sitios web, blogs, videoblogs, foros comunitarios, etc. para obtener información privilegiada sobre las experiencias más asequibles.
3. Reserva de vuelos
A la hora de planificar un viaje, el tiempo es crucial. Para viajes al extranjero, aconsejamos reservar los vuelos con tres a seis meses de antelación, porque los costes aumentan a medida que se acercan las fechas de salida. Los vuelos nacionales pueden reservarse con uno a tres meses de antelación. Busque en aplicaciones y sitios web de comparación de tarifas aéreas como Momondo, Kayak y Skyscanner para conseguir las mejores ofertas.
(Consejo profesional: cuando busque vuelos, no olvide borrar las cookies o utilizar una ventana de incógnito, porque los sitios web aumentan ocasionalmente los costes en función del historial de su navegador).
Otra sugerencia sería tomar un vuelo entre semana. Los días más baratos para volar suelen ser los martes y los miércoles. También se pueden encontrar ahorros significativos en vuelos operados a horas menos convenientes o en viajes de "ojos rojos". Para aprovechar las ofertas flash, también puede suscribirse a los boletines de noticias de las aerolíneas y a las notificaciones de ofertas de vuelos. También encontrará creadores de contenidos en las redes sociales que publican sobre descuentos en vuelos y ofertas de paquetes (vuelo + alojamiento, etc.)
4. Reserva de alojamiento
Una vez organizados los vuelos, es hora de reservar el alojamiento. Este es un aspecto en el que puede personalizar su experiencia en función de sus preferencias y presupuesto. Para los que viajan solos o a los que les encanta conocer gente nueva, los albergues son una gran opción, y puedes prepararte tu propia comida en la cocina común. Plataformas como Hostelworld o Booking.com ofrecen una amplia gama de opciones, desde habitaciones económicas hasta alojamientos más privados.
Para los que buscan un poco más de comodidad, los hoteles o Airbnb pueden ofrecer una experiencia más privada y a menudo lujosa. Si viajas en grupo, alquilar una casa o apartamento en Airbnb también puede ayudarte a ahorrar costes, ya que tendrás espacio para compartir y la posibilidad de cocinar tus propias comidas.
Consejo profesional: busque alojamiento fuera de las zonas turísticas. Estarás lo suficientemente cerca como para explorar la ciudad, pero por un precio más barato.
5. Organizar la conectividad
Estar conectado mientras se viaja es esencial para muchos, ya sea para navegar, mantenerse en contacto con sus seres queridos o simplemente compartir sus increíbles experiencias. Vamos a desglosar tus opciones:
Tarjeta SIM de viaje: Aunque está muy extendida, comprar una tarjeta SIM de viaje suele implicar ir a una tienda local y cambiar físicamente la tarjeta SIM, lo que puede resultar incómodo. Además, se pierde temporalmente el acceso al número de casa.
Datos Roaming: La mayoría conocemos los peligros que entrañan: tarifas desorbitadas y facturas impredecibles. Si puedes evitar los datos roaming, hazlo.
Wi-Fi: Puede parecer una buena opción, pero depender únicamente de la Wi-Fi puede dejarte desconectado en momentos clave, sobre todo si exploras zonas más remotas. Además, las redes Wi-Fi públicas pueden ser a menudo inseguras y poner en riesgo tus datos.
eSIM: La tecnología eSIM está transformando nuestra forma de estar conectados en el extranjero. Con una tarjeta de viaje eSIM, no hay necesidad de cambiar físicamente las tarjetas SIM cuando aterrizas en un nuevo país. Es una tarjeta SIM digital que puedes descargar y activar a distancia, directamente desde tu teléfono, y que te proporciona conectividad instantánea desde el momento en que llegas a tu destino. Y además es de prepago. Es decir, sin contrato y sin gastos en roaming .
6. Planificación del itinerario
Una vez elegido el lugar, el siguiente paso es crear el itinerario. Aunque resulte tentador incluir en cada día el mayor número posible de lugares de visita obligada, es fundamental encontrar un equilibrio entre el ocio y las visitas turísticas. Al fin y al cabo, los aspectos más agradables de viajar suelen ser los descubrimientos imprevistos que se hacen cuando uno se toma su tiempo. Un día imprevisto en un café del barrio o un paseo por un mercadillo secreto deben estar incluidos en su agenda.
A la hora de planificar, existen muchas herramientas que le ayudarán a organizarse. Puedes organizar tus días y programar las atracciones relacionadas con antelación con aplicaciones como Google Maps, que pueden ayudarte a ahorrar tiempo. Si quieres ponerte creativo, puedes crear tablones de ideas para tus vacaciones o descubrir joyas ocultas con la ayuda de Pinterest e Instagram. Eso sí, ten en cuenta que un itinerario decente deja cierto margen a la espontaneidad.
7. Preparación de los documentos esenciales
Antes de dejarse llevar por la emoción, asegúrese de que sus documentos de viaje están en orden. Esto incluye las tarjetas de embarque (digitales, físicas o ambas), el pasaporte, los visados (si los necesita), el seguro de viaje y cualquier otra documentación necesaria, como el carné de conducir si piensa alquilar un coche. Siempre es buena idea imprimir copias impresas de estos documentos y guardarlas en un lugar seguro, por si tienes algún problema con el teléfono o el acceso a Internet. Asegúrate de tener tus documentos de viaje en un lugar de fácil acceso.
En cuanto al equipaje, empieza por lo esencial: ropa adecuada para el clima (como un chubasquero para Irlanda o un bañador para el Caribe), un par de zapatos cómodos, artículos de aseo y cargadores para tus dispositivos. Un error común que cometen muchos viajeros es olvidarse de meter en la maleta adaptadores universales, sobre todo si se viaja a una región con tomas de corriente diferentes. Tenga a mano una lista de equipaje para no olvidarse nada.
8. Consejos de embalaje
Hacer la maleta para un viaje puede parecer una tarea desalentadora, pero la clave está en ser estratégico. Prepare todo lo que crea que va a necesitar y luego redúzcalo a la mitad. En serio. La mayoría de nosotros tendemos a hacer demasiadas maletas y, la mayoría de las veces, no utilizamos ni la mitad de lo que llevamos. Ten en cuenta el tiempo que va a hacer, la duración del viaje y las actividades específicas que tengas previstas, y haz la maleta en consecuencia. La ropa versátil que puedas combinar es tu mejor aliada.
Es imprescindible llevar artículos de aseo de tamaño de viaje, una buena almohada de viaje y una botella de agua reutilizable. También es aconsejable llevar un pequeño botiquín con tiritas, analgésicos y cualquier medicamento que necesites. ¿Qué cosas suele olvidar la gente? Los cargadores, los auriculares, la crema solar y una tarjeta de crédito de repuesto suelen olvidarse, así que revisa tu lista antes de salir.
Consejo profesional: los cubos de embalar son fantásticos para maximizar el espacio.
9. Seguridad en los viajes
Viajar está lleno de emociones, pero la seguridad debe ser siempre una prioridad. Antes de partir, compruebe si su destino exige alguna vacuna o precaución sanitaria. También es inteligente invertir en un seguro de viaje que cubra tanto las emergencias médicas como las no médicas, lo que le dará tranquilidad en caso de que ocurra algo inesperado.
Investiga las opciones de transporte público local antes de llegar para que te sientas seguro al desplazarte, y vigila siempre tus pertenencias, sobre todo en las zonas concurridas. Un buen consejo es guardar copias de tus documentos importantes en formato digital y físico, de modo que si algo sale mal, tengas copias de seguridad.
Por último, respete las costumbres y la cultura del lugar que visite. Un poco de investigación ayuda mucho a garantizar no sólo la seguridad, sino también el respeto a los anfitriones. Mantenerte conectado también es crucial: si tienes una página de viajes eSIM, siempre estarás a una rápida búsqueda en Google de los servicios médicos cercanos o de las indicaciones para llegar al hotel. Podrás relajarte y disfrutar de tu viaje sabiendo que cuentas con las herramientas necesarias para mantenerte seguro y sano.
Esperamos que esta guía le haya resultado útil para planificar su primer viaje. Así que vete, lleva poco equipaje, mantente conectado y toma siempre la ruta panorámica.