¿Busca la excursión perfecta de un día desde Melbourne? Tanto si busca costas escarpadas, bosques frondosos o ciudades con encanto, no le faltarán destinos increíbles a pocas horas en coche. Desde la emblemática carretera Great Ocean Road hasta los globos aerostáticos del valle del Yarra, esta guía cubre todo lo que necesita saber.
Excursiones de un día desde Melbourne
He aquí algunos de los mejores lugares para hacer una excursión de un día desde Melbourne. Estas rutas se han diseñado pensando en los viajes en coche y ofrecen la flexibilidad necesaria para detenerse en joyas ocultas y lugares pintorescos por el camino.
1. Dandenong Ranges: trenes de vapor y bosques frondosos
Tiempo de viaje (sólo ida): Alrededor de 1 hora (sin paradas).
Cosas que hacer por el camino: Comience su viaje con una parada en Ferntree Gully y recorra la ruta de los 1.000 pasos, una excursión panorámica pero difícil que rinde homenaje a los veteranos de la Segunda Guerra Mundial. Si el senderismo no es lo suyo, disfrute de la naturaleza y la avifauna de los alrededores con un suave paseo por la base del Parque Nacional de la cordillera Dandenong. A continuación, haga una parada en Sassafras, un encantador pueblo lleno de tiendas boutique que venden artesanía hecha a mano, antigüedades y productos locales. Mientras esté allí, tómese un café o un té en una acogedora cafetería como Miss Marple's Tearoom, un favorito local con un aire nostálgico.
Qué hacer al llegar: Comience su visita subiendo al tren de vapor Puffing Billy, una forma emblemática y familiar de conocer los frondosos bosques y las onduladas colinas de los Dandenongs. A continuación, diríjase a los Jardines Nacionales de Rododendros (ahora conocidos como Jardín Botánico de la cordillera de Dandenong) para disfrutar de impresionantes floraciones estacionales, tranquilos senderos e impresionantes vistas de las montañas. Explore el pueblo de Olinda, conocido por sus pintorescas tiendas, deliciosas panaderías y atractivas galerías de arte. Para los amantes de la aventura, el Parque Nacional de la cordillera Dandenong ofrece senderos que van desde paseos fáciles a excursiones más exigentes, con lugares destacados como las cataratas Sherbrooke y los imponentes fresnos de montaña.
2. Yarra Valley Bodegas y globos aerostáticos
Tiempo de viaje (sólo ida): Alrededor de 1 hora (sin paradas).
Cosas que hacer por el camino: Comience su viaje con un café junto al río en Warrandyte, una encantadora ciudad conocida por sus tiendas de artesanía y su ambiente relajado. Dé un corto paseo junto al río Yarra o explore las galerías y mercados locales en busca de artículos únicos hechos a mano. En Coldstream, deténgase en uno de los muchos puestos de carretera para recoger fruta fresca, especialmente en verano, cuando las bayas y las cerezas están de temporada. Si tiene tiempo, visite un pequeño viñedo local de la zona para realizar una cata de vinos improvisada antes de dirigirse a Healesville.
Qué hacer al llegar: Comience su aventura en el valle del Yarra con un paseo en globo aerostático al amanecer, que ofrece impresionantes vistas de los viñedos y las ondulantes colinas que se extienden a sus pies. Pase el día explorando bodegas de talla mundial como Yering Station, conocida por su exquisita gastronomía y sus elegantes vinos, o Domaine Chandon para disfrutar de una experiencia con vinos espumosos. Visite el Santuario de Healesville para encontrarse con animales autóctonos australianos como koalas, canguros y ornitorrincos en un entorno natural de arbustos. Termine el día en la Yarra Valley Chocolaterie, donde podrá degustar bombones artesanales, disfrutar de helados caseros o comprar regalos dulces para llevar a casa.
3. Península de Mornington Bodegas y senderismo
Tiempo de viaje (sólo ida): Alrededor de 1,5 horas (sin paradas).
Cosas que hacer por el camino: Comience su viaje con un paseo por el paseo marítimo de Frankston, donde podrá disfrutar de playas de arena, instalaciones artísticas junto al mar y un tranquilo paseo por el muelle. Tómese un café o un tentempié en uno de los cafés de moda de la zona antes de continuar. Haga una parada en Mount Eliza para disfrutar de una cata de vinos de boutique en un viñedo local, acompañada de tablas de quesos o aperitivos ligeros. Antes de llegar a la península, dé un rodeo hasta Arthurs Seat, donde la cima ofrece unas impresionantes vistas panorámicas de la bahía de Port Phillip, perfectas para una sesión fotográfica o una breve caminata.
Qué hacer al llegar: Empiece por relajarse en las Termas de la Península, donde podrá remojarse en piscinas termales rodeadas de exuberantes jardines. Los amantes de las actividades al aire libre podrán recorrer los senderos de Cape Schanck, que ofrecen escarpadas vistas de los acantilados y la oportunidad de explorar el histórico faro. Los aficionados al vino disfrutarán en las bodegas boutique de Red Hill, muchas de las cuales ofrecen catas, deliciosas comidas y espectaculares paisajes de viñedos. Si viaja con niños o busca diversión, el Jardín Encantado de Aventuras es una visita obligada, ya que ofrece laberintos de setos, tirolina y toboganes gigantes para vivir una experiencia familiar inolvidable.
4. Ballarat Historia de la Fiebre del Oro y parques naturales
Tiempo de viaje (sólo ida): Alrededor de 1,5 horas (sin paradas).
Cosas que hacer por el camino: Comience con una parada en Bacchus Marsh, donde podrá comprar productos frescos de temporada en los puestos situados junto a la carretera o disfrutar de un picnic entre los huertos. Si se siente activo, diríjase al desfiladero de Werribee para dar un corto paseo panorámico o una caminata más exigente con impresionantes vistas del desfiladero y sus afloramientos rocosos. Continúe hasta Ballan, una pintoresca ciudad con encantadoras cafeterías y panaderías perfectas para tomar un café o un ligero tentempié antes del tramo final hasta Ballarat.
Qué hacer al llegar: Sumérjase en la historia en Sovereign Hill, un museo viviente donde podrá buscar oro, explorar las calles del siglo XIX y contemplar por la noche el espectacular espectáculo de luces "Blood on the Southern Cross". Para los amantes de la naturaleza, los Jardines Botánicos de Ballarat ofrecen hermosos jardines y un lago sereno perfecto para pasear o hacer un picnic. Visite el Ballarat Wildlife Park para ver de cerca canguros, wombats e incluso cocodrilos. Complete su visita con una excursión al Eureka Centre, donde exposiciones interactivas cuentan la historia de la Eureka Stockade y su impacto en la democracia australiana.
Isla Phillip para pingüinos y koalas
Tiempo de viaje (sólo ida): Unas 2 horas (sin paradas)
Cosas que hacer por el camino: Deténgase en Tooradin para tomar un café y estirar las piernas mientras disfruta de las serenas vistas de la costa. Visite San Remo hacia el mediodía para ver cómo se alimentan los pelícanos en el embarcadero, un espectáculo único y divertido. Mientras esté allí, deléitese con pescado fresco y patatas fritas u otras delicias del mar en uno de los restaurantes locales. De camino a la isla, deténgase en los miradores de Bass Coast para contemplar vistas panorámicas de la campiña y el océano circundantes.
Qué hacer al llegar: Empiece por el Desfile de los Pingüinos, donde podrá ver a los adorables pingüinos regresando a sus madrigueras al anochecer. Explore la Reserva de Conservación del Koala para ver de cerca a los koalas en su hábitat natural. Diríjase al Centro Nobbies para contemplar las escarpadas vistas de la costa, explorar el paseo marítimo y aprender sobre la vida marina de la zona, incluidas las focas que pueden verse en las rocas. Para los amantes de las emociones fuertes, los karts del circuito del Gran Premio son una opción divertida, o pruebe a hacer surf en la playa de Smiths Beach, uno de los lugares favoritos tanto de principiantes como de profesionales.
6. Great Ocean Road Por los acantilados costeros y los Doce Apóstoles
Tiempo de viaje (sólo ida): Unas 4 horas (sin paradas)
Qué hacer por el camino: Empiece con un café en el paseo marítimo de Geelong, donde podrá contemplar las vistas de la bahía de Corio y explorar las extravagantes esculturas de bolardos de la orilla. Diríjase a Torquay, la capital australiana del surf, para visitar el Museo Nacional del Surf de Australia o comprar equipo en marcas de surf emblemáticas como Rip Curl y Quiksilver. Realice un pintoresco recorrido en coche hasta Lorne, donde podrá disfrutar de un almuerzo frente a la playa o emprender una corta excursión hasta Erskine Falls, una impresionante cascada rodeada de exuberante vegetación. Continúe hasta Apollo Bay, una encantadora ciudad costera conocida por su marisco y perfecta para hacer una parada rápida y repostar.
Qué hacer al llegar: Maravíllese ante los emblemáticos Doce Apóstoles, imponentes pilares de piedra caliza que se elevan espectacularmente sobre el océano; lo mejor es contemplarlos al atardecer para disfrutar de una experiencia realmente mágica. Baje por la escalinata Gibson Steps hasta la playa para contemplar más de cerca los acantilados. Visite el desfiladero de Loch Ard para explorar playas ocultas y conocer la historia de los naufragios de la zona. Para los amantes de la naturaleza, es imprescindible desviarse hasta el Parque Nacional de Great Otway, donde podrá pasear por antiguos bosques tropicales, avistar koalas en libertad y descubrir impresionantes cascadas como las de Hopetoun o Triplet.
7. Bendigo Por las minas de oro y el patrimonio chino
Tiempo de viaje(ida): Unas 2 horas (sin paradas).
Cosas que hacer por el camino: Comience su viaje con una parada en Sunbury, cuna de The Ashes, donde podrá explorar lugares históricos como la mansión Rupertswood o pasear por el sendero Jacksons Creek Trail. Continúe hasta Heathcote, una pequeña localidad famosa por sus vinos Shiraz. Visite una bodega como Heathcote Winery o Peregrine Ridge para disfrutar de una cata maridada con tablas de quesos locales. Si viaja en primavera, los florecientes campos de colza que encontrará por el camino le brindarán la oportunidad de sacar fotos impresionantes.
Cosas que hacer al llegar: Comience con una visita subterránea a la mina de oro Central Deborah, donde conocerá la historia de la fiebre del oro de Bendigo y experimentará cómo era la vida de los mineros. Visite el Museo del Dragón Dorado, que celebra la rica herencia china de la región, y no se pierda la oportunidad de ver el dragón imperial más antiguo del mundo. A los entusiastas del arte les encantará la Galería de Arte de Bendigo, que acoge con frecuencia exposiciones de talla mundial junto a su colección permanente. Pasee por el Parque Rosalind, con sus jardines patrimoniales y vistas desde el histórico mirador de la cabeza de la marmota.
8. Kinglake para cascadas y vida salvaje
Tiempo de viaje (sólo ida): Alrededor de 1 hora (sin paradas).
Cosas que hacer por el camino: Haga una parada en el parque Yan Yean Reservoir de Whittlesea, un lugar tranquilo con zonas de picnic y senderos para pasear. Disfrute de un café o un tentempié con vistas al embalse más antiguo de Victoria. Si lleva niños, el parque infantil es un lugar estupendo para que quemen energía. En las inmediaciones también hay granjas que venden productos frescos, como bayas y miel, perfectos para aprovisionarse para un día en la naturaleza.
Qué hacer al llegar: Explorar el Parque Nacional de Kinglake, donde los senderos van desde paseos fáciles a caminatas más exigentes. Lo más destacado es el mirador de Masons Falls, que ofrece unas vistas impresionantes de las cascadas y los matorrales circundantes. Prepare un picnic o una barbacoa para disfrutar en las zonas designadas del parque. Para vivir una experiencia única, visite las granjas locales que ofrecen recogida de bayas o paseos a caballo por el campo. Durante su visita, no olvide estar atento a la fauna salvaje, como canguros, equidnas y coloridas aves.
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